EL SÁBADO 29 Y DOMINGO 30 DE JULIO, se llevó a cabo en el colegio San jose, ciudad autónoma de Buenos Aires, la sexta edición de Magic Meeting; un evento temático inspirado en la saga literaria y películas de Harry Potter, repleto de actividades y sorpresas.
Vengo maquinando con este evento desde mayo. Para todos los que tuvimos la suerte de conocer y abrazar el universo mágico creado por J.K. Rowling, y no contamos con la cintura monetaria para pegarnos una vuelta por los UNIVERSAL en Orlando (todavía), este evento es una excelente oportunidad de meternos de lleno en ese mundo y conocer gente con el mismo desquicio, por sólo $130, una bicoca.
Voy a tratar de exponer mi experiencia con la mayor objetividad que el caso amerita. Bueno no, la realidad es que amo todo lo relacionado al mundo de HP desde que tengo once añitos. Amo Londres y todo su aire de melancolía y misterio, así como amo los días lluviosos porque son sinónimo de un tecito caliente y un buen libro junto a la ventana. La lluvia nos llama a reflexionar. Y Londres tiene eso de mágico, enigmático, único. Tuve la gran suerte de conocerlo un poquito y la verdad no me decepcionó para nada, al contrario, me despertó mas fascinación con sus callejuelas y sus taxis negros.
Volviendo al evento, fue genial. La organización, los stand con cantidad de chucherias para comprar - me compré la bufanda de Gryffindor que descaradamente planeo utilizar el resto del invierno, madurez te mando un beso- y el hecho de que se lleve a cabo precisamente en un colegio de estilo gótico encaja perfecto. En todas las aulas había algo para ver. Cada casa tenia su sala común, hasta había una sala para Muggles con el diario el clarín para que los acompañantes no se aburran. Se dictaron clases de pociones, se pasaron proyecciones, se podía jugar ajedrez mágico y en patio se organizaron partidos de Quidditch. Todas las actividades competitivas eran por puntos par ganar la copa de las casas.
Se colocaron escenografías de los diferentes libros esparcidas por todo el colegio, se ambientó el gran salón como en las películas, una chica con un carrito como el de la bruja del Expresso Hogwarts ofrecía grajeas y ranas de chocolate, y hasta se instaló un puesto de cerveza de mantequilla. A todo esto hay que sumarle el ir por los pasillos y cruzarse con montones de chicos - y no tan chicos- disfrazados de diferentes personajes, con uniformes de Hogwarts y de otros colegios que aparecen en la saga, con túnicas y sombreros. Todo eso te transportaba directamente a ese mundo mágico donde todos entendíamos de que estábamos hablando. Mis 26 años se evaporaron, dejando a una nena de 11 correteando por todos los stands al grito de "mira eso! y eso otro que genial!!".
Fué uno de los fines de semana más lindos de los últimos tiempos. Parece exagerado pero no lo es. El fenómeno Harry Potter es realmente digno de admiración. Es realmente increíble cómo la idea de un mundo mágico surgido de la imaginación de una mujer que vivía en un pueblo de Inglaterra, en la ruina, con depresión y al borde del suicidio, haya resultado en un bum literario sin precedentes que inspiró películas, se expandió por todos los rincones del planeta y sigue cosechando fanáticos de todas las edades, aún a veinte años de la publicación del primer ejemplar. Si, este 2017 festejamos los 20 años de la publicación de Harry Potter y la piedra filosofal, y yo todavia recuerdo perfectamente cómo me sentí al leerlo la primera vez.Porque cuando yo leí ese primer libro, mi impresión sobre el mundo cambió. Pase de estar conforme con lo conocido, a imaginar todas las historias increíbles que podían pasar afuera, imaginarias o no. Y fué tanto el impacto y el asombro, porque cuando mi hermano mayor llegó a casa y me prestó ese libro, pidiéndome que lo leyera con cuidadito y sin marcarle el lomo, por esa época todavía no se había estrenado ni la primer película. Pocos sabían por ese entonces, en el año 2000, principios de 2001, quien era Harry; por lo que yo empecé a leer sin tener ni idea de que se trataba la historia, sólo con la premisa que me daba la tapa ilustrada y la recomendación de mi hermano.
Me viene a la mente, aunque hayan pasado mas de 16 años, que el relato comenzaba con la profesora McGonagall -Maggie Smith te amamos!- vigilando durante todo el día a una familia de muggles ( que carajo era un muggle, me preguntaba), la familia Dursley...
Antes de darme cuenta, me encontré devorando el libro con avidez a la luz de mi velador, hasta las cinco de la mañana, repitiendo como un mantra "un capítulo más y me voy a dormir". Fué tal el impacto, que la literatura fantástica se convirtió en mi genero favorito.
Para cerrar, saqué algunas fotos del evento, pero tengo muy poca pericia con la GoPro y mi novio tiene pulso de maraquero, por lo que muchas salieron fuera de foco, pero voy a incluir algunas en esta entrada. La verdad no se que hubiera pasado si J.K Rowling se hubiera entregado a la depresión en vez de volcarse a escribir. Sin duda el mundo seria un lugar mucho mas corriente. Gracias a la vida, eligió lo segundo y con ese gesto, con animarse a escribir, tocó la vida de millones de personas y se convirtió en un ejemplo y un referente para muchos. Porque HP marcó un antes y un después en la literatura juvenil. Tengo muy presente dos imágenes en el evento. Una es la de una señora de entre unos 65 y 70 años, vestida con los colores de Gryffindor, con un sombrero seleccionador en la cabeza y un giratiempo en su mano, sacándose fotos sonriente con todo el mundo y disfrutando al máximo. La otra es la de un niño de no mas de 7, vestido de mini Harry y gritando "expelliarmus!". Eso es lo que me llevo del evento, Harry Potter no tiene limites de edad, es universal y eso lo hace tan grande, tan increible. Nos hace olvidar por un momento que somos simples y nos hace recordar que en realidad somos mágicos.
Por último, me viene a la mente una frase que leí por ahí, no se a quien pertenece pero es tan cierta, y dice algo como: Los libros son la prueba de que las personas pueden hacer magia. Eternas gracias J.K Rowling.
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